|  |  | TODO COMIENZA EN UN ATAQUE EXTRATERRESTRE...
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						1] [Imagen 2]
						[Imagen 3] Lo primero y ante todo, un saludo
						y deciros que estoy encantado de colaborar en este proyecto del instituto de lograr
						un buen periódico bianual, añadiendo esta vez una pizquita de cine
						en él.Mi intención es hablaros sobre la ingeniosa versión de Steven Spielberg
						del clásico del cine de ciencia ficción “War of the worlds “, (La guerra
						de los mundos para nosotros). Fuí a ver esta prometedora película de
						nuevo, y por mi parte salí más que satisfecho, mas quizás, que
						la primera vez que la vi, claro que viniendo de Spielberg no me esperaba de nuevo
						nada que no fuera magnifico. Una vez mas este prestigioso director ha demostrado
						absoluta maestría detrás de las cámaras ¡Increíble!
						¡Sensacional! La película cuenta además con un gran reparto encabezado
						por Tom Cruise y la historia, basada en la novela del mismo título de H. G.
						Wells pone los pelos de punta. Unos ingredientes que hacen de ella una bomba de relojería
						con unos efectos especiales y un sonido asombrosos...
 Todo comienza con un inesperado ataque extraterrestre de lo mas espectacular, a partir
						de ahí podemos observar la dura lucha de la humanidad por la supervivencia,
						y todo ello a través del punto de vista de una familia americana que intenta
						salvar su vida desesperadamente. En general todo el equipo de la película
						es buenísimo, uno de los detalles que también destacan sobradamente
						es el genial trabajo de John Williams aportando con la banda sonora una enorme carga
						de sonido y melodías chirriantes para hacernos sentir que estamos aun mas
						dentro de la situación. La gloriosa imagen fotográfica del film ha
						sido gracias a Janusz Kaminski.
 En fin, con todo esto quiero decir que para mi se trata de un film de ciencia ficción
						fantástico en todos los sentidos, seguramente habrá mucha gente que
						piense lo mismo de ella. A los que no la hayan visto se la recomiendo. Una joya.
 Otras películas que sin ninguna duda recomiendo son: “¿Quién
						puede matar a un niño?” de nuestro queridísimo Narciso Ibáñez
						Serrador, una grandísima obra de arte del cine de terror, y “Encuentros en
						la tercera fase” dirigida al igual que “La guerra de los mundos” por Steven Spielberg.
 Mario Lamas Díaz
						ESO 3B 
 LA NOVELA DE H. G. WELLS Argumento La guerra de los mundos, publicada
						en 1898, narra por primera vez en la historia de la literatura un tema que será
						recurrente desde entonces y originará todo un subgénero dentro de la
						ciencia ficción: la invasión hostil de la Tierra por extraterrestres
						procedentes de Marte, recibidos por una humanidad ingenua que tendrá que organizarse
						para impedir una destrucción masiva del planeta. A través de esta fábula
						en la que las descripciones científicas, las premoniciones sobre el futuro
						de la tecnología y los entresijos de la política ocupan un lugar central,
						H. G. Wells nos habla sobre la vanidad y la seguridad ficticia de una humanidad autosatisfecha,
						y los peligros que acechan su supervivencia. La novela muestra el pesimismo que sentía
						H. G. Wells (Gran Bretaña 1866-1946) sobre el futuro cercano (pesimismo que
						pronto se vería justificado ante la sucesión de desastres que jalonó
						el siglo XX). Comenzando con una serie de, aparentemente insignificantes, acontecimientos
						científicos (una nube de Hidrogeno entre Marte y La Tierra, fenómenos
						meteorológicos…) la narración va In crescendo a lo largo de los doce
						días que abarca, descubriéndonos como los primeros objetos alienígenas
						llegan a las afueras de Londres, los preparativos bélicos iniciales, la guerra
						y el desastre que sobrevienen sobre la humanidad hasta su sorprendente y ya clásico
						final. En un principio, los marcianos aparecen como criaturas patéticas, apenas
						capaces de moverse en la pesada gravedad terrestre, en la que no son siquiera capaces
						de salir del cráter creado por su aterrizaje, pero pronto revelan su auténtica
						naturaleza, cuando sus gigantescos trípodes se alzan y empiezan a arrasar
						todo lo que les rodea. La obra se desplaza del campo a la evacuación del mismo
						Londres y la perdida de toda esperanza mientras que el ejército británico
						sufre derrota tras derrota. El periplo del narrador se convierte en un viaje al horror
						a medida que descubre el destino que los invasores le deparan al hombre y queda claro
						que los terrestres no están tanto siendo conquistados como cazados. Crítica "La guerra de los mundos"
						no fue la primera vez que se abordó en literatura la existencia de seres extraterrestres,
						pero sí desde un nuevo punto de vista, pues anteriormente el tema era tratado
						por los escritores de la arrogante era industrial como encuentros con otras civilizaciones
						más primitivas. Pues para muchos era impensable otra tecnología más
						avanzada que la disponible por la sociedad finisecular, así por ejemplo el
						director de la oficina de patentes de Nueva York solicitó en 1899 la clausura
						del servicio que dirigía, aduciendo la sencilla razón de que "ya
						estaba inventado todo lo que podía inventarse".Evidentemente esta no era la opinión de una persona de la imaginación
						de Wells, no solo para idear premoniciones como las vertidas en esta novela -como
						las naves espaciales, el rayo láser, la guerra química o la organización
						de ayuda internacional ante desastres en gran escala-, sino que utiliza la fantasía
						para plasmar su concepción del colonialismo. En la propia novela Wells escribe
						acerca de la brutal conquista por parte de los marcianos: "Antes de juzgarlos
						con excesiva severidad debemos recordar que nuestra propia especie ha destruido completa
						y bárbaramente no tan sólo a especies animales, como el bisonte y el
						dodo, sino razas humanas culturalmente inferiores. Los tasmanienses, a despecho de
						su figura humana, fueron enteramente borrados de la existencia en una guerra exterminadora
						de cincuenta años, que emprendieron los inmigrantes europeos. ¿Somos
						tan grandes apóstoles de misericordia que tengamos derecho a quejarnos porque
						los marcianos combatieran con ese mismo espíritu?" El estilo literario
						de Wells es muy realista, aunque describiese situaciones muy imaginativa en sus novelas,
						las presenta de forma muy creíble. Ahí radica su éxito, el lector
						se ve transportado al mundo donde lo fantástico convive con lo cotidiano.
						En la noche del 30 de octubre de 1938, cuando el mundo temblaba por la ambición
						insaciable de un dictador, Orson Welles realizó una adaptación radiofónica
						de esta novela que causó una ola de terror en Estados Unidos por creerse millones
						de radioyentes que se trataba de una conquista marciana real en New Jersey.
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